Un mes más tarde de lo debido, vengo a publicar esto. Sin muchos avances, por aquello de que SOY SUBNORMAL Y ME HE PUESTO A ESTUDIAR Y TRABAJAR AL MISMO TIEMPO, y esa clase de cosas de la vida. Como siempre, un recordatorio para los que no sepan de qué va esto.
La «pila de la vergüenza» (pile of shame, en inglés) es un concepto que se utiliza para hablar de esos juegos que hemos ido acumulando en nuestra biblioteca (digital o física) a base de ofertas varias y que nunca hemos llegado a jugar ni una sola vez, ni para comprobar que funcionaban. ¿En qué consiste el post de la vergüenza? Muy sencillo. En un post inicial (este) se explica qué juegos están en la pila de la vergüenza y qué juegos se están jugando. Cada tres meses se hará un nuevo post informando de los progresos. En caso de que en ese periodo de 3 meses puedan finalizarse los juegos que se están jugando se establecerá cuales serán los siguientes juegos a jugar, o se dejará a votación popular cuáles deben ser. Simple y avergonzante. Obviamente todo esto no valdría de nada si siguiésemos comprando de forma compulsiva, así que no se deberían comprar juegos hasta vaciar la pila de la vergüenza. Empezamos.
Jugando
Sin apenas novedades de nuevo. Sigo con mi racha de poder jugar poco.
Final Fantasy VIII (PC): por fin me he decidido a retomarlo, pero poco he podido avanzar.
Torchlight II (PC): He empezado con los 100 cc. A ver qué tal.
Trine 2 (PC): Con el mando la cosa avanza mejor, pero me he quedado atascado en un jefe.
Jugados
Apenas he jugado en estos últimos meses, así que poco he podido avanzar.
Juegos nuevos
Boderlands (el original, en PC), y Borderlands: The Presequel (en PS3). Al primero no pude resistirme por estar en Humble Bundle a 90 céntimos y porque soy subnormal. El otro es un regalo de aniversario.
Juegos abandonados
Dissidia 012 FInal Fantasy (PSP). Después de echarle como 10 horas lo acabé dejando. El juego tiene un problema bastante grande: está tan pensado para que juegues contra amigos y te pases bastante tiempo echando combates fuera del modo historia que llega un punto en el que es imposible seguir avanzando en el modo historia si no lo has hecho, ya que las habilidades y equipo de los enemigos son demenciales, por no hablar de las diferencias de nivel. Mi tiempo es demasiado limitado, y no soy muy dado a farmear, así que aí se queda.
The Elder Scrolls: Arena (PC) Lo malo de jugar a juegos del año patapluf es que como se te cruce la jugabilidad estás jodido. Justamente eso me pasó.
Unepic: el juego está genial, pero tiene un gran problema. Cierto jefe solo se puede matar usando dos armas concretas, por lo cual, si no has aumentado tu destreza en alguna de esas dos armas desde el principio, estás jodido. Como básicamente me tocaría estar dando vueltas para subir niveles y mejorar esas habilidades, he acabado por dejarlo, y ya si eso lo retomaré en un futuro.
Shatter (PC) Con este juego me ha pasado lo mismo que me pasa con los juegos de lucha: se me vuelven repetitivos y acabo rallándome y los dejo.
Resumiendo: no he acabado ningún juego de la lista de juegos que estaba jugando y he abandonado 4 de la lista de juegos por jugar. Sin grandes novedades. Por desgracia para mí la entrega de mi Trabajo de Fin de Máster se ha atrasado hasta octubre, así que no creo que disponga de demasiado tiempo libre hasta entonces. Si queréis ver una lista completa de los juegos en los que tengo una partida empezada, podéis ir aquí. Por otra parte, está la pila de la vergüenza, con esos juegos a los que nunca he jugado o a los que empecé pero no llegué a completar y perdí la partida (Baldur’s Gate, Planescape: Torment y Waking Mars son ejemplo de esto), que suma 70 juegos (algunos ya he asumido que no los jugaré nunca y he decidido que mejor hacemos como que nunca existieron, las ventajas de lo digital). Me queda mucho por jugar.
El post de la vergüenza. Tercer trimestre de 2015 es una entrada original de Otakufreaks. Puedes seguirnos también por Twitter y Facebook.